Cuatro listas presenta el peronismo mendocino, Parisi, Guevara, Guillen, y Carmona son quienes las encabezan, todos ligados al kirchnerismo de una u otra forma, con un relativo liderazgo, pero con muchas ganas e ímpetu en algunos casos. ¿Propuestas? Mmmm solo algunos han presentado alguna propuesta clara, ese es el caso de Guillen, los demás son candidaturas apoyadas en la “prensa” que han recibido sus nombres y el “apoyo de arriba”.
Por eso lo sucedido en Lavalle es diferente. Ninguno de estos candidatos provinciales podría caminar o siquiera aspirar a ser candidato “sin una estructura superior”, sea, organizaciones sociales asociadas a él (financiadas por el estado) o el apoyo de una fracción del “aparato” o sea de la cúpula dirigencial del peronismo mendocino y/o nacional, que lo ponga en el ojo y mente del pueblo, del electorado. Sin el aparato, la financiación nacional, o el expreso apoyo de la jefatura peronista provincial, son un ciudadano más.
Sin lugar a dudas, el peronismo mendocino debe estar feliz, porque ha surgido un nuevo líder popular, capaz no solo de movilizar al peronista, a la juventud, sino también a radicales, progresistas, y por sobre todo al pueblo independiente, sin dinero de por medio, solo con la esperanza en un hombre, Edgardo González.
No hay un solo peronista en Mendoza que como el Edgardo pueda movilizar tantas personas que, voluntariamente salgan a dar la cara por uno. Cuatro años de buena gestión (dada la crisis en el movimiento peronista), pueden ser un puente hacia cosas más grandes.
“No le gusta estar en la legislatura, él quiere volverse a Lavalle” me dijo un dirigente político hace un tiempo, yo no lo comprendí. Ahora está más claro, el efecto popular que genero en Lavalle cuando se candidateo y todo lo sucedido durante la campaña muestran que necesitaba ese contacto con la gente, que quizás por una visión política tradicional, le falta a todos los legisladores provinciales.
Su origen rural, y su realidad como productor agrícola, le tendieron un puente con bases firmes a las realidades de la población de Lavalle, a su forma de pensar, a su idiosincrasia, a su cultura, a sus sentimientos.
Del otro lado, solo midieron fuerzas con base en el dinero a disposición, y el aparato, cosas que ya está comprobado no tienen el mismo efecto que años antes. La idea de continuidad no tuvo el efecto esperado, y a eso se sumó una pésima campaña del radicalismo y quienes se le plegaron. González, y su gente, vencieron ampliamente a los dos oficialismo, Righi y Cornejo.
La única alianza realizada por González, fue precisa, certera, y lo fortaleció en gran medida. Su alianza con Julián Gallardo, fue fundamental para esta victoria, las fuerzas populares de Gallardo ya venían campeando la zona hacía rato. Allá por la Fiesta de Lagunas del Rosario, cuando en uno de los eventos gastronómicos, se vio la división irreconciliable manifestada en la forma en que se sentaron y distribuyeron los asistentes… fueron los de Gallardo quienes hicieron sonar el clarín de batalla y ya salieron a proclamar su posición. Luego Gallardo los llamo a la calma, se ordenaron, y quedaron a la espera. Por eso cuando la lista de González fue una realidad, un tsunami de militantes salió a comerse la cancha.
González y la gente que lo apoyo, le sacaron 17 puntos de diferencia al aparato de Righi/Vaquer (dentro del peronismo es una derrota importante), y a Cambia Mendoza (Cornejo, Libres del Sur, y Petristas) 50 puntos de diferencia, aplastante.
“Todo mayo será para agradecer a los cientos de vecinos de los distritos que ayudaron con la campaña” aseguró Carlos Acosta y comento que no se están juntando con nadie en estos momentos, ni de Lavalle ni de la Provincia.
Por Mariano Molina tel.2613832487 Mendoza
