Vecinos y usuarios del Centro de Salud Nº 43 de Costa de Araujo denunciaron ayer un presunto trato desatento y deficiente hacia quienes acuden por urgencias pediátricas. La queja, compartida vía WhatsApp por una mamá de la zona, detalla una serie de irregularidades ocurridas el martes 22 de abril cuando llevó a su hija, de apenas cinco años, con un cuadro de resfrío severo.
Según relata la vecina, al llegar al nosocomio fue recibida por el enfermero, quien habría cuestionado la gravedad del caso y le indicó que “si no era una urgencia verdadera” debería sacar turno para pediatría, aconsejándole además recurrir a un consultorio particular. “Si tuviera cómo pagar un médico privado, no vendría al centro de salud”, señala la madre de la pequeña paciente.
“Lo primero que me dice el enfermero es que si no era de una urgencia que no me podían atender; segundo, que tenía que sacar turno a un pediatra porque la doctora no la podía ver; y tercero, que si no, que fuera a un particular. Si tuviera, no iría al centro de salud para que vean a mi hija.”
La mujer afirma que, pese a sacar turno “con mala gana”, la médica de guardia, apenas realizó una evaluación superficial. “Ni siquiera la revisó: lo primero que me dijo fue que ella no era pediatra y que tenía que sacar turno” explica. Según la denunciante, la doctora pediatra del centro, “andaba paseándose por el pasillo” y sólo le miró la garganta, diagnosticando un “estado viral” y recetando ibuprofeno sin auscultar los pulmones.
Horas más tarde, ante el empeoramiento de la niña, la familia se vio obligada a acudir a un médico particular, el Dr. German Zingariello, donde se les informó que el cuadro había evolucionado a bronquiolitis, con presencia de “mocos en los pulmones”.
La madre, denuncia además la extensa espera —aproximadamente media hora— sin que se realizara revisión alguna, y acusa a los profesionales del centro de “falta de voluntad para trabajar”. En su mensaje, la vecina hace un llamado a la acción:
“Hasta cuándo con el Centro de Salud de Costa de Araujo. ¿Esperan que pase algo muy grave para que se muevan?… Si no quieren trabajar, renuncien. Traigan gente que realmente quiera atender. ¡Madres, padres, jóvenes: hagámoslo viral para luchar por la salud de nuestros seres queridos! Queremos doctores que realmente quieran trabajar.”
La situación ha generado preocupación en la comunidad, que reclama un pronunciamiento de las autoridades sanitarias y mejoras urgentes en la atención pediátrica.
Por Mariano Molina tel.2613832487 Mendoza
